" Por qué los cabrones ríen y los honrados padecen, por qué no puedo ser libre si no hago daño a nadie". Nach Scratch

miércoles, 24 de enero de 2024

Historia de la Virgen de la Paz y Esperanza de Córdoba, hoy 24 de enero

 


 Lo primero, para no extender la entrada, si queréis saber por qué hoy se conmemora el Día de la Virgen de la Paz, en este artículo del periódico ABC lo explican.

Mi experiencia personal con la Reina de la Paz daría para otra entrada... y extensa. Sí comenzaré esta entrada diciendo que un año más, como marca la tradición desde 2009, hoy 24 de enero, Día de la Virgen de la Paz, he acudido a misa en su iglesia del convento franciscano del Santo Ángel; más conocida como "Capuchinos" (por cierto, da la casualidad de que hoy es el Día de San Francisco, aunque en lugar Asís que es el patrón de la orden franciscana, de Sales). 

Culto por el Día de la virgen de la Paz 2024.

Para los que no sois de Córdoba, dicha plaza la preside la escultura en piedra del Cristo de la Misericordia, más conocido como "Cristo de los Faroles". Hay una película dedicada que lleva el mismo nombre, cuya copla que se compuso para la misma, se adaptó a marcha procesional para el Señor de la Humildad y Paciencia, imagen cotitular a Ntra. Sra. de la Paz y Esperanza Coronada que procesiona el Miércoles Santo. He otra casualidad y es la coincidencia con el miércoles. 

El paso de Ntro. Padre Jesús de la Humildad y Paciencia haciendo entrada en Carrera Oficial en la Semana Santa de 2015.

El paso de Ntra. Sra. de la Paz y Esperanza recorriendo sus primeros metros en la estación de penitencia de 2023.


Como digo en el título, centra esta entrada la historia de la talla y por qué el imaginero Juan Martínez Cerrillo quiso que se consagrara bajo esta advocación (las imágenes no se nombran, sino que se consagran bajo una advocación).  La respuesta la tenemos en la propia biografía del imaginero; en el contexto histórico. 

Nació en Bujalance (Córdoba) en 1910 en una de las muchas familias humildes, como la mayoría de nosotros en nuestro tiempo. Muchas veces hablamos de esos talentos que podemos desarrollar hasta convertirlo en nuestro trabajo. El de Martínez Cerrillo era el arte; concretamente el dibujo, la escultura y al terminar sus estudios en la Escuela de Artes y Oficios "Mateo Inurria" de la capital, el guadamecí. Pero su mayor interés lo encuentra en el dibujo y la escultura; algo muy ligado. No puedes esculpir si no sabes dibujar. De hecho, la escultura es dibujar/pintar en tres dimensiones. Desarrolla esta destreza hasta el punto de destacar en la imaginería el neoexpresionismo barroco; también la policromía (para los que no lo sepan, es pintar las esculturas).

Mientras realizaba el servicio militar en Sevilla, dedicaba su tiempo a visitar iglesias y empaparse del arte sacro. También los museos, por supuesto. Lo interesante o, lo inquietante por el contexto, es que estamos en torno a 1936. Solo tenemos como referencia que la edad a la que realizaría el servicio militar, entre 18 y 21 años, coincidió con ese capítulo trágico de nuestra historia. No he encontrado datos sobre la biografía del imaginero durante la guerra, tan solo que su carrera despegó en el 36 y, en 1939, recién finalizada la contienda, un grupo de excombatientes le encargaron una imagen mariana. Fue entonces cuando Martínez Cerrillo talló la virgen que nos ocupa. El 8 de septiembre de 1939, por cierto, en Córdoba festividad de la copatrona (la patrona de Córdoba es Santa Victoria), la Virgen de la Fuensanta, la imagen fue bendecida en la iglesia de San Andrés. Años más tarde, en 1947, el mismo imaginero tallaría para la iglesia de Santa Marina, y para reemplazar una talla anterior, la virgen de la Esperanza. Casualmente, después la Esperanza se trasladaría a la iglesia de San Andrés. Y ya que nos gustan las curiosidades, para la talla del cotitular de la Esperanza, Jesús de las Penas, Martínez Cerrillo lo talló en madera de pino de Soria. Pero, aún hay una leyenda que ha arraigado, en especial, en la Córdoba cofrade. Se cuenta que el imaginero tomó de modelos para las imágenes de la hermandad de la Esperanza a una gitana, primero para la virgen, y un gitano para el Señor de las Penas. Se concreta que fue en la plaza de la Corredera. Es por ello que a las imágenes son conocidas entres los cofrades como el Gitano y la Gitana. Como le veo simbolismo a todo, desde que lo supe lo consideré como un guiño hacia la fraternidad. Casi en nuestros días, ambas cofradías, la de la Paz y la de la Esperanza, se hermanaron. Y a propósito de la cofradía, os dejo dos marchas en honor a nuestra virgen. Seáis os creyentes o no, como arte u obra musical en sí, se aprecia. De hecho, aprovecho para poner ejemplo de amigos que no son creyentes pero muy cofrades; amén de grandes personas y respetuosas con esas otras confesiones. Aprovecho para incluir, o más bien para suscribir este gran proverbio, además, de nuestros tiempos: 

"A veces las personas más agradables están cubiertas de tatuajes y las peores van a la iglesia los domingos"





Sí, soy consciente de que estamos tratando un tema muy delicado y que las heridas de la división que ocasionó y motivó la Guerra Civil aún siguen abiertas. Os pido que lo estéis leyendo con toda objetividad y como parte de la historia. Pues bien, precisamente la propia guerra y esa división tuvo mucho que ver cuando finalizó la talla y quiso otorgarle la advocación de la paz, por el fin de la guerra, y la esperanza en esa paz que perdurase. Desde entonces en la historia de España hemos escrito otros capítulos trágicos, aunque también periodos de sosiego en mayor o menor medida. Pero gracias a Dios, ninguna otra guerra. Nos quejamos de una situación, de otra, con mayor o menor razón, pero no queramos vivir una guerra como las que vemos en las noticias y, aunque empatizamos con las víctimas, por otra parte parece cosa que no va mucho con nosotros; ocurre en otro lugar y lejos de aquí. Procuremos evitar ese pensamiento y no perder la empatía desde nuestros vecinos hasta un niño que pasa hambre en Nepal, por ejemplo. 

Ya habréis deducido el sentido que le doy a la entrada en este Día de la Virgen de la Paz. Y como reitero, nos complicamos demasiado la vida en asuntos que nos hacen más mal que bien; que al final consiguen más confrontación que fraternidad. Me acojo a algo que suena tan infantil como es desear la paz y que nos llevemos bien; que dejemos de complicarnos la vida. Por ejemplo, toda guerra o una trifulca familiar, comienza por las disputas de unos cuantos. Que dos no pelean si uno no quiere. Y que, como vemos en esta entrada, aparte de que nos interese la historia y más las leyendas, en ellas encontramos un mensaje. 

Conté en la entrada referente a las Tres Culturas que, precisamente al paso de la procesión de la Cofradía de la Paz por los Jardines de Colón, paró frente a la mezquita que allí hay. Un reportero de Paso a Paso, de Canal Sur Radio, entrevistó al imán de la mezquita. Dijo que lo que ya sabemos no lo contempla su religión; de hecho lo condena. Se me quedó grabado con el cierre que le puso a esa entrevista y más al paso de esta cofradía, que ya de por sí era un acto de fraternidad o un guiño entre ambas religiones, y las dos abrahámicas. Dijo: "Islam significa paz".



Ah, y lo más importante, feliz en vuestro día a las que os llamáis Paz. Y más valor merecéis aquellas que hacéis honor a vuestro nombre. Y también a los Franciscos de Sales.