" Por qué los cabrones ríen y los honrados padecen, por qué no puedo ser libre si no hago daño a nadie". Nach Scratch

jueves, 21 de octubre de 2010

La importancia que tienen las pequeñas cosas de la vida

Después de unos meses sin aparecer por aquí, ya tocaba refrescar el blog, cargado de inspiración y dispuesto a contar nuevas historias y tratar sobre temas que nos afectan a nuestras vidas. Siento el tiempo que he estado desplazado y agradezco a todos mis seguidores por vuestra paciencia y espera.

Hoy quiero hablaros sobre la importancia que tienen las pequeñas decisiones. Lo que a simple vista parece una tontería, puede convertirse en algo crucial que marcará para siempre el camino de nuestras vidas. ¿Nunca os habéis parado a pensar como llegasteis a conocer a vuestra pareja, por ejemplo? ¿Y la decisión que tuvisteis que tomar para que tu en ese momento te cruzases en la vida de esa persona que hoy día es tu pareja?

Afortunados son los que dan importancia a las pequeñas cosas de la vida, porque no por ser minucias quieren decir que parezcan nada importantes. Cuando caminamos por nuestra vida debemos ir con siempre con siete ojos, fijándonos en cada cosa que encontramos a nuestro alrededor, porque esas cosas que, a simple vista no tienen importancia, pero si nos fijamos bien, nos daremos cuenta de que son las señales que nos indican que vamos por el buen camino. Hay quien lo ve una tontería y no le da el valor que merece. Pues bien, son esas personas las que creen que van andando por su camino y no se dan cuenta de que el camino lo dejaron atrás y andan ya apartados de él.

Es importante para tener una buena vida llena de felicidad y satisfacción aprender a leer esas señales. 

 
Os cuento una anécdota:  

Caminaba por la calle y le iba a dar un toque al móvil a una amiga. Justo al cogerlo y antes de pulsar la primera tecla, ella misma me daba un toque. Habría quien no le diera mucha importancia y dijera "bah, casualidad". Pero como dice mi buen amigo Fran, las casualidades no existen. El que los dos en ese mismo instante pensásemos en darnos un toque no es ninguna casualidad. Yo lo llamaría una compenetración, una conexión espiritual con esa persona, algo parecido a la telepatía. Una unión que supera lo tangible para adentrarse en lo místico.

Pero lo más importante es que se trata de una señal que te avisa de que eso no era una simple casualidad y el que nos diésemos ese toque al mismo tiempo tenía un significado. Un significado que entendí como que yo y ella somos dos piezas únicas en el mundo y solo encajamos nosotros dos y con nadie más. Esa señal avisa de que tenemos que estar encajados.

Si me permitís un consejo, mirad muy bien por donde pisáis y tened siempre mucha vista en lo que encontráis en vuestro camino. Cuando tengáis que tomar una decisión, siempre es mejor analizar profundamente que sufrir las consecuencias de un error.

Gracias a todos los seguidores de mi blog ya que, como digo siempre, sin vosotros esto no tendría sentido.


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